Las inspecciones policiales vincularon las minas con políticos de alto nivel, incluido el hermano del expresidente Nursultan Nazarbayev.
Según una declaración emitida por el gobierno, continúa la represión de las criptominas en Kazajstán; sin embargo, algunos nombres importantes están vinculados a estas minas esta vez. De las 106 minas cerradas después de una operación, 55 se cerraron voluntariamente y las autoridades obligaron a las 51 restantes a cerrar.
Según los informes, las empresas obligadas a cerrar no pagaron impuestos, evadieron impuestos y colocaron su equipo en zonas económicas especiales sin permiso. Según el comunicado, Bolat Nazarbayev, hermano del expresidente Nursultan Nazarbayev, Alexander Klebanov, presidente de Central Asian Electric Power Corp. (suministra electricidad a 2 millones de hogares), se encontraban entre los nombres vinculados a las minas.
Las autoridades confiscaron 67.000 máquinas valoradas en 100.000 millones de tenges kazajos (193 millones de dólares) y presentaron 25 casos penales contra los infractores.
En febrero, el presidente Kassym-Jomart Tokayev ordenó a las autoridades kazajas que inspeccionaran los documentos aduaneros, fiscales y otros documentos técnicos de todas las operaciones de criptominería en el país. Se asignó a la Agencia de Supervisión Financiera para supervisar la inspección e informar a la oficina del presidente en marzo.
Después de la prohibición de China, Kazajstán se convirtió en un centro minero para muchos criptomineros, ya que el país limitó los precios de la electricidad. Inicialmente, fueron bienvenidos, pero la red nacional se vio sobrecargada debido al alto consumo de energía de las actividades mineras. Como resultado, el país comenzó a tomar medidas enérgicas contra las instalaciones ilegales.