Las regiones de LATAM y EMEA (Europa, Medio Oriente y África) se están convirtiendo en las más populares para respaldar pagos con criptomonedas. La mitad de la población de la región espera que las criptomonedas sean una gran parte del futuro del sector financiero.
Una encuesta reciente mostró que el 50% de los participantes del criptomercado esperan que los activos digitales tengan un impacto notable en el futuro del sector financiero global. Además, el 74% de los participantes en la región estaban abiertos a realizar transacciones con una empresa que acepta Bitcoin.
Los residentes en América Latina tenían más probabilidades de recibir sus tarifas de pago en moneda digital, mientras que los de la región EMEA ocupaban el segundo lugar. El informe agregó que el 67% de la infraestructura criptográfica estaba en América Latina.
Otro informe de Ripple dijo que el 50% de las personas en América Latina creían que las criptomonedas interrumpirían el futuro sistema monetario, mientras que casi las tres cuartas partes estaban dispuestas a trabajar con organizaciones que respaldaban las criptomonedas.
Los resultados de la encuesta muestran que los latinoamericanos están dispuestos a invertir sus recursos en criptomonedas. En Medio Oriente, el 67% de los participantes también se mostraron optimistas sobre el futuro del espacio de activos digitales.
Crecimiento de las criptomonedas en economías con problemas
El crecimiento de las criptomonedas en países que enfrentan turbulencias económicas ha sido encomiable. Venezuela es un ejemplo de un país que lucha contra un alto nivel de inflación pero tiene mucha gente invirtiendo en criptomonedas. A pesar de las altas actividades de comercio de criptomonedas, la mayoría de los venezolanos están desempleados.
El año pasado, El Salvador adoptó el uso de Bitcoin como moneda de curso legal. Sin embargo, el país ha estado luchando contra los crecientes niveles de inseguridad. Cuando El Salvador implementó la ley Bitcoin, recibió advertencias de instituciones financieras internacionales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI), diciendo que representaba un riesgo para el sistema financiero del país.
En África, la República Centroafricana también respaldó Bitcoin como moneda de curso legal. Sin embargo, el país es uno de los más pobres del mundo y una gran población carece de acceso a la electricidad e Internet, lo cual es vital para respaldar las transacciones de Bitcoin.
El crecimiento de las criptomonedas en esta región podría atribuirse al hecho de que Bitcoin y algunas monedas alternativas podrían usarse como cobertura contra la inflación. Por lo tanto, las personas en estas regiones con niveles de hiperinflación almacenan su riqueza en criptomonedas para preservar su poder adquisitivo.
