La Oficina de Protección Financiera del Consumidor está reemplazando su Oficina de Innovación con una nueva unidad para apoyar una iniciativa más amplia.
La nueva “Oficina de Innovación y Competencia” reemplazará a la anterior Oficina de Innovación, que se enfocaba en analizar áreas que necesitaban un tratamiento regulatorio especial para empresas individuales. Esa oficina se encargó de procesar las solicitudes de cartas de no acción y los términos de los entornos limitados regulatorios.
“Después de una revisión de estos programas, la agencia concluye que las iniciativas demostraron ser ineficaces y que algunas empresas que participan en estos programas hicieron declaraciones públicas indicando que el Negociado les había conferido beneficios que el Negociado expresamente no les otorgó”, dijo la CFPB en su anuncio.
En cambio, la nueva oficina "analizará los obstáculos para abrir los mercados, comprenderá mejor cómo los grandes jugadores están eliminando a los más pequeños, organizará eventos de incubación y, en general, facilitará que las personas cambien de proveedor financiero", según un anuncio de la regulador. En lugar de centrarse en asignaciones para innovadores individuales, la nueva oficina busca promover ampliamente la innovación.
Dice que está alentando a las empresas, las nuevas empresas y los miembros del público a presentar peticiones de reglamentación para una mayor claridad sobre reglas particulares.
“Esto ayudará a nivelar el campo de juego y fomentar la competencia al garantizar que cualquier acción que tome el CFPB se aplicará a todas las empresas en el mercado”, dijo el anuncio.
La unidad pertenece a la división de Investigación, Mercados y Regulación de la CFPB, donde aprovechará esos recursos para examinar los problemas de la estructura del mercado que obstaculizan la innovación. La unidad también tiene la tarea de identificar cómo los jugadores más grandes, como Big Tech, pueden amenazar la competencia justa para los jugadores más pequeños.
El anuncio no menciona específicamente las criptomonedas, pero la oficina preparó el escenario para una mayor intervención el mes pasado cuando invocó una disposición en gran parte no utilizada de la Ley Dodd-Frank, que le otorga la capacidad de supervisar "no bancos" que se dedican a servicios financieros orientados al consumidor. en base a los riesgos potenciales. Esa regla entrará en vigor esta semana.
